Historias de Mujeres de Cultura Dominicana - Parte 2

Llegado el domingo y todos allí para el mercadillo el resto de la mañana transcurrió sin cambios ya casi al medio día pensé que no vendría, pero llegó, para mi alegría, yo misma me sentía sorprendida de cómo cambió mi ánimo al verle entrar, me sentía feliz de verle, o más bien eufórica, ahora a esperar a ver qué pasa…, y a la hora del aperitivo se sentó a mi lado en la mesa y me preguntó

Él sonreía, yo estaba encantada, pues ya tenía tema para hablarle de forma más distendida.

Esa tarde la pasamos hablando de todo y todos los temas, cultura general, política internacional, necesidades del barrio y como podíamos mejorar lo que se hacía, mientras yo cobraba y anotaba todo en el computador, entre rato y rato publicaba fotos del mercadillo en las redes sociales para que la gente se animara a venir. Cuando de pronto me dice –

Se notaba complacido. Pasamos una tarde realmente agradable, ya al final del evento se acerco para despedirse pero, yo estaba rodeada de gente y me hizo simplemente un gesto de despedida y se marcho como había llegado.